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Cuando se producen precipitaciones o fuertes vientos no es seguro realizar labores a grandes distancias del suelo. Como expertos en Trabajos verticales Alvasa te explicaremos cómo afecta el mal tiempo a los trabajos en altura y los riesgos a los que se expone el personal.

En caso de mal tiempo toma previsiones

Antes de empezar a realizar cualquier trabajo de altura se deben tomar en cuenta las condiciones climáticas.

Siempre es necesario que el personal cuente con el equipamiento apropiado. Además, la empresa debe tomar las medidas de seguridad correspondientes. Pero se deben redoblar los cuidados si hay mal tiempo.

Usar calzado anti resbalante, casco aislante, guantes y botas de goma y seleccionar ropa abrigada o impermeable son algunas alternativas que ayudan a prevenir un accidente.

Las precipitaciones disminuyen el grado de aislamiento de los equipos.

Las escaleras y los andamios deben estar fijos a la superficie de trabajo. Por seguridad estos tienen que ser de materiales no conductores de electricidad.

Cómo afecta el mal tiempo a los trabajos en altura

Las precipitaciones de lluvia, nieve o granizo y las fuertes corrientes de viento pueden afectar cualquier trabajo de altura. Además de volverlos más complicados también los hace más riesgosos.

Algunos de los efectos que pueden tener estas condiciones climáticas sobre los trabajos de altura son:

Pérdida de visibilidad

Cuando existe mal tiempo por precipitaciones o vientos muy fuertes se produce una disminución considerable de la visibilidad. Esto afecta la percepción que el trabajador de altura tiene del entorno dificultando el cumplimiento de las actividades en altura.

Al tener menos visibilidad aumenta la probabilidad de que se produzcan diferentes tipos de accidentes como caídas o golpes con objetos.

Afección a la estabilidad del terreno

Si la precipitación de lluvia o nieve fuerte o moderada persiste por un largo periodo puede tener provocar efectos perjudiciales en el terreno en donde están colocados los andamios, escaleras u otros elementos.

La superficie en donde están colocados se vuelve inestable. Esto facilita que los equipos se desplacen, tambaleen o vuelquen.

Si el personal está laborando en una zona rodeada de grandes montañas de tierra o nieve, aumenta la posibilidad de que ocurra un deslave o desplazamiento de esta.

Cambios en la superficie de tránsito

Debido a las precipitaciones el área por la cual los trabajadores se desplazan se vuelve resbaladiza.

Por esto es necesario que estos posean los equipos de protección y anticaídas necesarios. Especialmente si están sobre un techo, escaleras de gran altura o andamios.

Riesgo de caída de rayo

Si se presenta una tormenta eléctrica surge el riesgo de la caída de rayos cerca de la zona de trabajo o trabajador. Incluso puede producirse directamente sobre estos.

Saber cómo afecta el mal tiempo a los trabajos en altura es indispensable para que conozcas los riesgos y tomes las previsiones correspondientes. Somos expertos en realizar trabajos verticales, si desea pedir presupuesto de alguno de nuestros servicios, contáctenos.